La familia del diseñador Carlos Rolando dona gran parte de su archivo al Centro de Documentación Publicitaria
Nos cuesta creer que haya alguien en el mundo del diseño gráfico y la publicidad que no conozca la figura de Carlos Rolando. Uno de los más grandes de los últimos 50 años. Para muchos, Rolando fue Dios. Y para él, Dios era Paul Rand. Internet esta repleto de artículos sobre su trayectoria. La lista de marcas para las que trabajó fue inmensa: Camper, Evax, Lois, Ram...
La familia nos ha donado al Centro de Documentación Publicitaria gran parte de su archivo. La semana pasada llegaron las primeras cajas, cargadas con todo el fondo fotográfico así como multitud de bocetos, de ilustraciones, de imágenes listas para llevar a la repromaster. Al abrirlas, fue difícil no emocionarse.
Como responsables ahora de parte de su legado, ya hemos empezado a catalogar el material para que vuelva a tomar vida. Porque de eso se trata, de hacer que el pasado siga ahí, formando parte del presente, porque solo así se entiende lo que estamos viviendo.
Casualmente, además, en estas semanas se está anunciando la preventa de un libro (saber más) editado por EXPERIMENTA y que recoge toda su vida, su legado. En sus páginas aparecen numerosos trabajos de Carlos Rolando procedentes de nuestro fondo histórico y que ya conservábamos desde hacía años. Merece y mucho la pena hacerse con un ejemplar; nosotros ya lo hemos hecho.
